Ya que llega el "buen tiempo", buen tiempo para salir al monte a caminar y disfrutar de los impresionantes parajes que nos ofrece la naturaleza. Con esta entrada, que es la primera sobre senderismo, me gustaría dar a conocer una ruta con dificultad media-baja al menos para mi parecer, ya que la he hecho varias veces y me resulta bastante agradable para pasar la mañana en el monte en compañía o en solitario.
La ruta comienza desde la Font del Perelló en el Parque Natural del Desierto de las Palmas (Castellón). Se puede ir en coche hasta la fuente ya que el acceso es bastante bueno, si partimos desde Benicasim debemos buscar la carretera CV-147 que sube al Desierto de las Palmas, esta carretera la encontramos a la entrada del pueblo y está bien indicada, solo hay que seguir las indicaciones del Parque Natural. Una vez en marcha debemos recorrer 6,2Km y encontraremos a mano derecha un entrador muy ancho con la indicación del Barranco de Miravet, también hay un cartel con las rutas del parque y un poco más adelante chopos en el arcén derecho.
Si nuestro origen es Castellón debemos dirigirnos a la Ermita de la Magdalena y desde allí también por la CV-147 comenzamos la subida al Desierto, hasta llegar al mismo cruce hay 9,2Km y nos quedará a mano izquierda.
Si no ha habido problema en encontrar el cruce entonces os debéis encontrar en el punto naranja de este mapa donde pone Ud. está aquí.
Partiendo de este punto debemos recorrer unos 3-3,5Km adentrándonos en pleno Parque Natural hasta que veamos una indicación hacia la derecha que pone Font del Perelló. Entonces tomamos el desvío y a pocos metros encontramos una chopera con un merendero donde poder dejar el coche unos metros antes para no tapar la pista que más tarde será nuestro recorrido.
Si habéis encontrado esta señalización entonces es que estamos en el camino correcto y es aquí donde realmente empieza la ruta. La ficha de la ruta es la siguiente:
- Dificultad: media-baja
- Distancia 2000m (ida)
- Duración aprox: 1h (ida)
- Desnivel: 169m
Tomamos la pista forestal que nos encontramos bordeando la zona recreativa y comenzamos el ascenso a través de ella. La verdad es que de los 169m de desnivel más de la mitad se recorren durante el principio del recorrido y es por ello que la dificultad es media-baja y no solo baja.
El camino no tiene pérdida ya que está correctamente indicado con las señales homologadas de senderos forestales, en este caso ya que se trata de una PR (senda de pequeño recorrido) las indicaciones serán de color amarillo y blanco, solo hay que seguir estas indicaciones y girar cuando se encuentren en ángulo hacia la derecha o izquierda.
Durante el recorrido predomina el pino rodeno (Pinus pinaster) pero también se pueden encontrar muchas otras especies como la coscoja (Quercus coccifera), encinas (Quercus ilex), algún madroño (Arbutus unedo), romero (Rosmarinus officinalis), tomillo o timonet como se le conoce por aquí (Thymus vulgaris) y otras muchas especies ya que la variedad del parque es muy rica, aunque por supuesto no podemos olvidar a la especie que da nombre al parque, el palmito (Chamaerops humilis) con sus dátiles rojo oscuro que son un manjar para los perros, de ahí el nombre de caramelo de perro (caramel de gos).
Una vez llegamos a la parte mas alta del recorrido debemos ir descendiendo hasta el castillo con precaución ya que el suelo de tierra por el que veníamos se convierte en una zona rocosa sin demasiado peligro pero sin dejar de tener precaución.
Estas son las vistas que nos esperan al llegar al punto más alto del recorrido, poco más adelante llegamos a un cambio de rasante desde donde se puede ver el castillo, debemos seguir la senda en dirección a el, en este punto no está tan bien marcada con en el anterior tramo pero no tiene pérdida ya que el castillo lo tenemos enfrente y nos podemos orientar dirigiéndonos hacia el mismo.
El camino no tiene pérdida ya que está correctamente indicado con las señales homologadas de senderos forestales, en este caso ya que se trata de una PR (senda de pequeño recorrido) las indicaciones serán de color amarillo y blanco, solo hay que seguir estas indicaciones y girar cuando se encuentren en ángulo hacia la derecha o izquierda.
Durante el recorrido predomina el pino rodeno (Pinus pinaster) pero también se pueden encontrar muchas otras especies como la coscoja (Quercus coccifera), encinas (Quercus ilex), algún madroño (Arbutus unedo), romero (Rosmarinus officinalis), tomillo o timonet como se le conoce por aquí (Thymus vulgaris) y otras muchas especies ya que la variedad del parque es muy rica, aunque por supuesto no podemos olvidar a la especie que da nombre al parque, el palmito (Chamaerops humilis) con sus dátiles rojo oscuro que son un manjar para los perros, de ahí el nombre de caramelo de perro (caramel de gos).
Una vez llegamos a la parte mas alta del recorrido debemos ir descendiendo hasta el castillo con precaución ya que el suelo de tierra por el que veníamos se convierte en una zona rocosa sin demasiado peligro pero sin dejar de tener precaución.
Estas son las vistas que nos esperan al llegar al punto más alto del recorrido, poco más adelante llegamos a un cambio de rasante desde donde se puede ver el castillo, debemos seguir la senda en dirección a el, en este punto no está tan bien marcada con en el anterior tramo pero no tiene pérdida ya que el castillo lo tenemos enfrente y nos podemos orientar dirigiéndonos hacia el mismo.
Y al fin llegamos a nuestro destino, el Castillo de Miravet, es un lugar tranquilo donde sentarse a almorzar o simplemente a descansar para la vuelta.
Y como el camino de vuelta ya os lo conocéis aquí termina esta entrada que espero hayáis disfrutado de ella y sobretodo del paseo.
Unas vistas espectaculares....aunque me costaron unos pantalones.
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